Hoy en día, la sostenibilidad se ha convertido en un tema de conversación frecuente, y es esencial comprender qué significa y cómo ponerla en práctica.
Barbara Ibarra - 01/11/23
En su esencia, la sostenibilidad implica tomar conciencia de nuestro futuro y las acciones que debemos emprender para afrontarlo con éxito. Se trata de encontrar un equilibrio entre satisfacer nuestras necesidades actuales sin comprometer los recursos que las generaciones futuras necesitarán.
El lugar donde podemos dar los primeros pasos hacia la sostenibilidad es nuestro propio hogar. Es en este espacio donde podemos transformar las acciones sostenibles en hábitos cotidianos. Un cambio fundamental para lograr la sostenibilidad en el hogar radica en nuestras decisiones de consumo. Al tomar decisiones más conscientes, no solo contribuimos a la conservación de los recursos naturales, sino que también repercutimos positivamente en nuestra economía familiar.
Es por ello que te dejamos algunos hábitos sostenibles que podes adoptar en tu hogar para contribuir a un futuro más limpio y saludable.
1. Reciclaje Consciente
El reciclaje es una de las maneras más sencillas de ser amigable con el medio ambiente. Separa cuidadosamente los materiales reciclables en tu hogar, tales como papel, vidrio, plástico y cartón, y llévalos a los puntos de reciclaje cercanos. Por otro lado, separa los residuos orgánicos y utilizalos como abono para las plantas ubicadas en el exterior.
La acción de separar los residuos según su destino contribuye a conservar los recursos naturales de nuestro planeta. Hacer una correcta separación de los desechos del hogar puede salvar miles de litros de agua.
2.Cuidado Responsable del Agua
El agua es un recurso vital, y su conservación es esencial para un futuro sostenible. Verificar el estado de las cañerías internas, canillas y depósitos de inodoros. Una canilla goteando desperdicia 48 litros por día, que equivale al consumo diario de 2 personas en los países con carencia de agua. Debemos tomar conciencia y utilizar el agua con responsabilidad no solo beneficia tu factura, sino que también ayuda a preservar este recurso valioso.
3. Reducción de consumo energético
La iluminación del hogar supone un 25% de la energía que se consume en el país, pero si en lugar de lámparas tradicionales utilizamos las de bajo consumo o lámparas led, colaboramos reduciendo ese consumo entre un 50% y un 80%. Estas tienen una vida útil mayor, iluminan más y no contienen elementos tóxicos, por lo que no es necesario reciclarlas.
Implementar electrodomésticos con Eficiencia Energética “A” también favorece a la reducción del consumo de energía del hogar. Es fundamental comparar la información de cada producto antes de comprarlo. Un artefacto de clase energética A++ puede consumir hasta un 70% menos de energía que uno de clase A y hasta un 85% menos que uno de clase C.
4. Aceite “usado”
Desecha el aceite de cocina correctamente. Un error común es tirar el aceite directo al desagüe, pero esto contamina miles de litros de agua que jamás podrán ser utilizados para otros fines. Lo correcto es guardar el aceite usado en una botella hasta que esté llena, cerrarla bien y tirarla en los desechos inorgánicos.
En la vida cotidiana, cada pequeño cambio en nuestros hábitos suma. Al adoptar estos hábitos sustentables en tu hogar, no solo reduces tu huella ecológica, sino que también inspiras a otros a seguir tu ejemplo. Juntos, podemos trabajar hacia un futuro más limpio y más saludable para todos.
